Tanto si has empezado a escribir un blog como si llevas algún tiempo compartiendo tus conocimientos en internet y no obtienes los resultados que buscas, lo más seguro es que te hayas planteado por qué Google no está indexando tu contenido. O si lo está haciendo porque tus artículos no aparecen en las primeras páginas. ¿Qué puedes hacer para mejorarlo? Y es que además de crear buenos posts tienes que optimizarlos para lograr que posicionen bien en las búsquedas de Google.
¿Pero, cómo redactar para SEO? Para que tus contenidos sean atractivos para Google hay una serie de herramientas y consejos básicos que te serán de mucha utilidad de cara a aplicarlos para tus próximos artículos y empezar así a crear posts 100% optimizados.
Sentido común
Aunque hablar de SEO puede sonar muy técnico, lo cierto es que lograr el posicionamiento en Google en buena parte tiene mucho de sentido común. De hecho, lo primero que tienes que hacer antes de empezar a redactar tu contenido es elaborar una lista, que tampoco tiene que ser muy larga, de las palabras/temáticas sobre las que va a tratar tu artículo. ¿La tienes? Entonces ya estás listo para pasar al siguiente paso.
Palabras clave
Ahora es el momento de coger la lista que has elaborado y empezar a descartar palabras y quedarte solo con aquellas que sean clave y que lograrán llevar a tu texto a las primeras posiciones de los resultados de búsqueda. Existe una herramienta que te va a venir muy bien para esta tarea: Keyword Planner. Con ella podrás ver qué palabras de tu lista se buscan más, cuáles no tienen apenas interés y las que tienen una competencia elevada.
Aquí el consejo es encontrar aquellas palabras que los usuarios busquen mucho pero que tengan poca competencia. Como casi nadie las está usando pero la gente tiene mucho interés, escribir un artículo utilizándolas hará que tu texto se posicione mucho mejor. Otra manera de refinar aún más la lista es hacer tú mismo búsquedas con tus términos clave en Google y ver sus sugerencias.
Cuando ya hayas acortado tu lista a 2 o 3 palabras clave, es hora de redactar tu texto.
¿Menos es más?
Depende de la temática del artículo y de lo que quieras contar, tu post tendrá una extensión u otra. ¿Esto afecta al posicionamiento? Lo cierto es que los textos largos tienen más puntos de lograr un buen lugar en los resultados de Google que los cortos. Así que el consejo es que lo mejor que puedes hacer es no redactar por debajo de las 300 palabras.
Contenido único
Mucho del contenido que se produce hoy en los blogs es un recopilatorio de ideas de otros posts de la misma temática. Incluso a veces y sin quererlo podemos incluso escribir las mismas frases que otros artículos o, en el peor de los casos, copiar el contenido de otros blogs. Estas prácticas no benefician a nadie ni te ayudarán a posicionar mejor, de hecho cuando Google lo descubra penalizará a tu blog.
Lo mejor es ofrecer tu propia opinión y conocimientos sobre la materia, recoger información de muchas fuentes y elaborar un artículo de calidad y desde un punto de vista personal. Sólo de esta manera conseguirás crear un contenido único y de valor, lo que hará que más usuarios se sientan atraídos por éste, al ofrecerles información que no hubiesen encontrado en otros medios.
La fuerza del titular
Puede que sea una tarea que te guste abordar antes de escribir el artículo o después, pero es primordial que dediques una buena parte del tiempo a conseguir un título para tu post que invite a leerlo. Tiene que ser atractivo para tu público y que despierte curiosidad, es decir, tiene que tener gancho. El segundo aspecto a tener en cuenta a la hora de escribir el titular es que debe incluir la palabra clave por la que quieres que los usuarios te encuentren en Google.
Eso sí, no tienes que introducir el término de forma forzada, como si le hablaras a un robot. Como ya hemos comentado tiene que ser un título impactante, original, entretenido… Si cumple alguno de estos adjetivos también tendrá muchas más posibilidades de que se comparta vía redes sociales y que, en consecuencia, posiciones mejor.
El toque final
El último paso para que tu artículo cumpla todos los requisitos de la redacción para contenidos SEO es escribir la meta-descripción. Si no sabes qué es, solo tienes que hacer una búsqueda cualquiera en Google y fijarte como debajo del título y la URL de cada resultado aparece un breve texto de dos líneas. Esta es la meta-descripción, que también tendrás que elaborar para tu post y donde de nuevo deberás introducir la palabra clave de tu texto.
Aunque no tiene una consecuencia directa en mejorar el posicionamiento, si consigues escribir un texto que sea atractivo para tu público y que le incite a hacer clic y leer tu artículo sí que te ayudará a posicionarte mejor. Y eso es porque cuanta más gente haga clic en tu contenido y lo lea, más relevante serás de cara a los algoritmos de Google.